19/01/2018 Por Marisa Avogadro para Forodeseguridad.com FUENTE Las nuevas tecnologías solucionan problemas de seguridad, pero también ofrecen oportunidades a los delincuentes.
La historia de la seguridad
Pensar en temas de seguridad, no es sólo una preocupación de la actualidad. Podemos señalar la época de los faraones, donde existían custodios de los templos, vestidos con túnicas azules y considerados por algunos autores como los precursores de los representantes de la seguridad pública y de cuya vestimenta tomaría el color, el uniforme de las fuerzas policiales.
Asimismo, la palabra seguridad, proviene del latín securitas : cualidad de seguro y seguro, significa: libre y exento de todo peligro, daño ó riesgo.Por su parte, la palabra policía deriva del griego polis: ciudad y se empleó este vocablo para referirse a todas las actividades de una sociedad y la vida que en ella se desarrollaba, sujeta a determinadas normas e individuos encargados de protegerlas.
Por lo tanto, el tema de la seguridad como el de la policía, han estado presente en todas las civilizaciones, desde tiempos remotos, independiente del nombre que se les haya asignado. En Egipto, unos 1000 años A. de C., existían oficiales públicos encargados de funciones de policía. En el Siglo I D. de C , en el Imperio Romano, los funcionarios públicos llamados lictores, eran guardianes de los magistrados.
Qué son las nuevas tecnologías
Desde el ámbito de las nuevas tecnologías, diferentes soluciones se aportan a áreas vitales de la Seguridad Pública. Desde una conexión a Internet, que permite, sin barreras de tiempo y espacio, mantener actualizados de forma permanente al personal policial sobre novedades de los hechos ocurridos. Soluciones geomáticas, que tienen como objetivo proporcionar información cartográfica relacionada con información estadística y documental, que se emplea en áreas de inteligencia criminal para la confección de mapas del delito. El desarrollo de sitios electrónicos vinculados a la seguridad pública. Posicionamiento global determinado por satélite (GPS) para unidades móviles. Cámaras de filmación con trasmisión simultánea para controlar el movimiento de sectores geográficos determinados. Telefonía celular con conexión a Internet para lugares inhóspitos. Base de datos con huellas dactilares digitalizadas… para nombrar algunas de las múltiples actividades que ya se están llevando a cabo o bien que se pueden llegar a implementar.
Finalmente, tenemos el ámbito de los delitos cometidos con el empleo de NTIC. Hablamos de ciberdelitos ó delitos informáticos que definimos como las actividades ilegales en las que intervienen medios electrónicos y nuevas tecnologías y dentro de ellos encontramos: delitos tradicionales concretados en la sociedad virtual mediante las NTIC, ej: estafas, chantajes, extorsión.
También hay delitos nuevos, que se llevan a cabo desde la red, de modo on-line ( electrónico), destinados a atentar contra la confidencialidad, integridad y disponibilidad de información; daños de entrada en sistemas de computación ó bien en programas , en parte de ellos ó en datos computarizados. Así se constituyen delitos sobre datos personales, ciberterrorismo, delitos económicos, de pederastia, contra la propiedad intelectual, entre otros.
Nuevas tecnologías y seguridad
Hoy conviven una sociedad real con la virtual. La cibercultura de las polaridades, el anonimato, la libertad absoluta, la circulación de la información sin barreras de tiempo y espacio, con ubicuidad; propagación de información al infinito, con fuentes confiables y fuentes apócrifas y con informaciones ciertas y adulteradas.
Desde este universo tecnológico se abre una perspectiva diferente para el ámbito de la Seguridad Pública. Desde la solución a problemas técnicos y operativos en el ámbito de dicha seguridad, con el empleo de estas nuevas tecnologías y en el área de la aplicación a nuevos ámbitos delictuales.
El Tercer Milenio propone desafíos: un nuevo paradigma de seguridad pública a aplicar frente a un nuevo paradigma social, el de la sociedad de las nuevas tecnologías y un nuevo paradigma delictual.